Historia de la parroquia

«Es misión del Obispo cuidar de que no haya grupo de cristianos sin la atención religiosa que necesita. Por ello, el 15 de Septiembre de 1981, conociendo la rapidez con que se construía el poblado de ASFAIN, creamos en él la parroquia de Santa Teresa. E inmediatamente y con gran satisfacción los feligreses se apiñaron alrededor de su Párroco, D. Alejo Navarro, primero, ayudado de D. Antonio de Gregorio, y D. Fernando de las Heras, después; y surgieron iniciativas y aportaciones de todo orden, que, recogidas y orientadas por la Comisión pro templo parroquial y aprobadas por el Obispado con las modificaciones oportunas, han dado el resultado que hoy admiramos.

Cuánto se puede conseguir cuando personas particulares, entidades privadas y públicas se unen bajo un mismo objetivo y cada uno pone lo que está a su alcance. La maravillosa idea que en nuestro caso se ha realizado hubiera sido imposible sin este fenómeno de unión. Unos aportaron ideas, otros esfuerzos personales e instrumentos de trabajo, los más, dinero en cantidades más o menos elevadas según sus posibilidades, la diócesis, además de los elementos básicos del templo procedentes de la parroquia de Alcorlo y en menor medida de Sacedoncillo y notables cantidades en metálico, puso personas que aglutinaron y estimularon a todos. Y todo hecho de manera plenamente voluntaria y con gran ilusión y alegría. Es la expresión más clara del refrán la unión hace la fuerza.»

Sigüenza, 27 de mayo de 1987. D. Jesús Pla – Obispo de Sigüenza-Guadalajara

Cronología

  • 1966. Creación en Azuqueca de Henares de la Asociación Familiar Independiente (ASFAIN).
  • 1978. Creación por parte de ASFAIN de una Cooperativa de Viviendas.
  • 1979. Aprobación del Plan de Urbanismo de la zona para la creación de 415 viviendas.
  • 1981 (15 de septiembre). Creación de la parroquia de Santa Teresa en la urbanización de ASFAIN.
  • 1982. Se completa el proceso de expropiación del pueblo de Alcorlo, se destruyen todas las edificaciones excepto el templo parroquial del Salvador.
  • Creación en ASFAIN de una «Comisión Pro-Reconstrucción de la Iglesia de Alcorlo».
  • Se obtienen los permisos para el traslado del templo.
  • Desmontaje del templo parroquial de Alcorlo y algunos elementos del templo de Sacedoncillo.
  • Comienzan las obras de la cripta del nuevo templo parroquial de Santa Teresa.
  • 1984 (4 de marzo). Bendición de la nueva cripta y comienzo de su uso litúrgico.
  • 1986. Comienzo del proceso de construcción del nuevo templo de santa Teresa.
  • 1987. Conclusión de las obras del nuevo templo.
  • 1988 (18 de marzo). Inauguración del nuevo templo parroquial de santa Teresa por parte del obispo D. Jesús Pla Gandía.
  • 2020. Edificación de una sacristía-despacho con acceso desde el crucero de la iglesia.

La antigua iglesia del Salvador de Alcorlo

«La primitiva iglesia constaba de una sola nave, con el presbiterio ligeramente elevado y de mayor altura en su bóveda, recubierta por un artesonado de madera de trazado mudéjar. La nave constaba de cuatro tramos, separados por tres arcos semicirculares decorados con bolas y puntas de diamante, sostenidos por pilastras achaparradas rematadas a su vez por líneas de molduras simulando sencillos capiteles. A los pies del templo, sencillo coro, y en el costado de la Epístola se abría una pequeña puerta baja que permitía el ingreso a la dependencia de la sacristía, cuerpo añadido en ese lado con posterioridad a la primitiva iglesia. La puerta principal de acceso estaba situada al mediodía, la espalda de remate triangular con dos huecos para las campanas al poniente, y el ábside hacia levante; esto es, se encontraba el templo perfectamente «orientado”, según los cánones tradi­cionales de las construcciones cristianas.

Todo en la iglesia rural de Alcorlo invitaba a la evocación de siglos pretéritos. Su origen, indudablemente, era románico, de la época en que se creó el pueblo como unidad nueva de convivencia para pastores, ganaderos y agricultores venidos del norte, de la Castilla de más arriba de las sierras. Del siglo XIIlI-XIII con toda seguridad. La forma de la espadaña así lo confirma. Y la forma de sus arcos y su decoración con bolas y puntas de diamante. También cuatro detalles tallados y puestos en las esquinas de la cornisa exterior del templo, dan idea de su antigüedad venerable: se trata de sendos canecillos con representación de figuras muy borrosas que parecen ser animales, y que muy bien podrían tratarse de los símbolos de los cuatro evangelistas.

 Posteriormente sufrió algunas reformas. Y así la puerta principal es posterior, del siglo XVI, consistente en arco semicircular exornado de sencillas molduras, e incluido dentro de un alfiz cuadrangular, en cuyas enjutas aparecían sendos adornos en forma de rosetas o florones. El artesonado del presbiterio, en forma de alfarje ochavado, es de obra evidente­mente de tradición mudéjar, realizada por artesanos carpinteros especializados en esos temas, y que en toda Castilla fueron siempre de raza mora, gentes muy imbuidas de la tradición islámica.»

«Una iglesia antigua para una nueva parroquia», Antonio Herrera Casado

Fotografías de la antigua iglesia parroquial de Alcorlo

El nuevo templo de santa Teresa

«El nuevo templo parroquial de Santa Teresa de Jesús ha sufrido modifi­caciones con respecto al primitivo del Salvador de Alcorlo. No son sustan­ciales, pero sí le permiten tener mayor capacidad y diafanidad. Es la primera de esas modificaciones la orientación, que en el caso de Azuqueca no se ha reproducido con exactitud la que tenía en un principio. Esto es: el templo nuevo no está «orientado» al estilo clásico, sino que ha sido puesta la espadaña mirando al oriente, y el ábside con su presbiterio y altar mayor mirando al oeste. Por lo tanto, la puerta principal primitiva queda abierta al norte, mientras que al sur, al costado del sol, se ha abierto otra puerta, similar de altura y anchura a la original. Además se ha habilitado otro ingreso, pequeño y de arco de medio punto también, sin ningún adorno especial, sobre el muro de la espadaña, con objeto de permitir el acceso a la cripta de una forma independiente desde la calle sin tener que atravesar la iglesia.

La otra novedad estructural fundamental se refiere a la forma y dimensiones de la cabecera del templo, que en Azuqueca se le ha dotado de un crucero que la primitiva no tenía. Aprovechando el cuerpo de edificio que ofrecía la sacristía del antiguo, y que se ha dejado al costado de la epístola, pero totalmente abierto y comunicado con la nave principal, se ha añadido un cuerpo similar al costado del evangelio, poniendo también el presbiterio ligeramente elevado.

En el exterior, el aspecto del templo es, por lo tanto, muy similar al antiguo: se han colocado los elementos originales trasladados desde Alcorlo, especialmente los más nobles, como han sido todas las piezas de piedra tallada y tratada de cantería: esquinas, cornisas, pilastras, contrafuertes, arcos y puertas, así como la mayor parte de las piedras de la espadaña. El cuerpo principal de la antigua sacristía ha venido a construir el brazo de la epístola del nuevo crucero. Y solamente las ventanas derramadas de los muros han sido construidas nuevas, mientras que de la iglesia abandonada de Sacedoncillo procede la puerta de la fachada actualmente al sur, y algu­nos elementos de sillar necesarios para reemplazar a algunos muy dañados de la antigua, o para ponerlos en el nuevo brazo del crucero norte. En el muro de la espadaña se ha colocado la pequeña puerta que en el edificio primitivo servía de paso desde el presbiterio a la sacristía.

A los pies del templo se ha puesto un coro de pequeñas dimensiones, de estructura similar también al de la primitiva iglesia. Del suelo que existe bajo esta zona del coro, surge una escalera que baja a las dependencias de la cripta. En los huecos de las ventanas, estrechas y altas, con pronunciado derrame hacia interior y exterior en un estilo plenamente medieval, se han colocado algunas vidrieras emplomadas con iconografía alusiva a la función litúrgica del edificio. Se ha trasladado también a ASFAIN la pila bautismal primitiva del templo de Alcorlo, que hoy aparece en el nuevo templo. Trátase de una pieza magnífica, de sencilla decoración románica, de más de una tonelada de peso, y que viene a ser el símbolo perfecto de la antigua comunidad.»

«Una iglesia antigua para una nueva parroquia» Antonio Herrera Casado